viernes, 1 de junio de 2012

Carta abierta de un mindundi al Sr. Mas

Carta abierta de un mindundi al Sr. Mas
Sr. Mas, debo reconocer que es Vd. mi president aunque me duela, porque en eso consiste la democracia. Vd. parece no creer en ella, mejor dicho afirmo que no cree en ella. Sus declaraciones respecto a la pitada del público asistente al partido de la Copa del Rey, demuestran su tarannà, su falta de visión política dirigida a un público nada respetuoso con los demás. ¿Cree Vd. que son sus votantes? ¿Cree que le van a votar en la próxima convocatoria?
Es Vd. el legítimo representante del Jefe del Estado y por tanto quizá podría considerarse que la pitada iba también dirigida a Vd. ¿No lo había pensado? En ese caso mal hecho porque debería conocer los orígenes de su cargo.

Sr. Mas ¿Qué le parecería que en la Plaza de San Jaime, múltiples turistas del resto de España se pusieran a pitar Els Segadors? Una de dos: o cree que estos turistas serán respetuosos, educados y prudentes y por tanto inexistentes para Vd. porque lo que le importan son las personas con capacidad de generar conflictos en la calle y si ellos son prudentes y educados no los generarán. O bien cree que no lo hacen por pudor o respeto, sino por miedo. No quiero pensar en esta segunda posibilidad ¿lo piensa así Vd.?
Pero Sr. Mas, en su puesto es obligatorio mirar más allá de lo inmediato y más allá de lo inmediato es que se sobrepase la capacidad de aguante y aparezcan problemas gordos. ¿O a lo mejor es eso lo que le mueve? Porque ya lo dice el refrán: a rio revuelto…
  
Además, con esas declaraciones da pie para que los energúmenos no solo no respeten los símbolos sino la ley, esa ley que Vd. contribuye a elaborar. Pero también habrá personas respetuosas a las cuales el descrédito de los políticos les están llevando a considerar esa ley, como la bota calzada por irresponsables como Vd., y consideren llegado el momento de un cambio radical. Repase la historia o mejor, léala.
Sr. Mas hay dos formas de gobierno y no más: revolución y legitimidad. En la revolución la ley se considera deslegitimada y es factible conculcarla. Peligroso para los integrados como Vd. La legitimidad, viene definida por la expresión Estado de Derecho, por la cual la ley debe cumplirse y cuando esa ley se considere obsoleta, como es humana, se cambia. Para eso están Vds. los políticos.
Cuando es una persona como Vd. la que efectúa esas declaraciones, abre la caja de Pandora de la falta de respeto y consideración que son la base de la convivencia, así pues todo es posible y por tanto, reitero, de una irresponsabilidad impropia de un cargo público.
Su cargo Sr. Mas se lo debe a una ley fundamental, la Constitución, en la que establece la soberanía del pueblo español, su himno y su bandera. Personalmente no soy un devoto  de los símbolos pero mucha gente tiene una especial sensibilidad hacia ellos y la libertad de expresión tiene el límite del respeto a los derechos y la dignidad de los demás, evidentemente conculcados en esa pitada.
Sr. Mas, si alguien pita desconsideradamente a una institución del Estado, Vd. debería considerarse ofendido, porque Vd. y su cargo lo son. Entonces esa media sonrisa mientras hacía esas declaraciones, se convierte en una triste mueca de alguien que aún no se ha enterado del cargo que ocupa y del origen del mismo.
Piense, por favor, antes de hacer declaraciones que le van a oír, no solo los energúmenos. También existe una masa mucho más numerosa aún, de silenciosos y respetuosos ciudadanos que siguen pensando que brams d’ase no pujan al cel pero ¿hasta cuando?
Atenta y respetuosamente le saluda

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